Directorio Carlos María de Alvear

Cartas a Strangford y Castlereagh

A los 15 días del puesto de Director Supremo Alvear envió a Río de Janeiro a Manuel José García. Este debía entregar al embajador británico en Brasil, Lord Strangford, una documentación a través de la cual ofrecía al ministro inglés de Relaciones Exteriores el dominio del Río de la Plata. El objetivo era evitar que las Provincias Unidas cayeran en poder de los españoles.

Las cartas

Los cambios en la política europea y la restauración absolutista repercutieron directamente en el proceso de emancipación de Hispanoamérica. Frente a ellos, la respuesta de destacados políticos y militares rioplatenses fue la de reimpulsar los intentos para establecer una monarquía constitucional en el Río de la Plata. Esa fue la causa de las misiones diplomáticas de Sarratea, Rivadavia y Belgrano hacia el Brasil y Europa.

El Director Alvear, ante esta situación, a sólo quince días después de asumir como Director Supremo, envió a Río de Janeiro al secretario de la Asamblea, Manuel José García, con el objetivo de impedir que la proyectada expedición española recibiera el apoyo de la corte portuguesa.

Pero, entre otras cosas, García llevaba dos cartas: una para el embajador inglés en Río de Janeiro, Lord Strangford, y otra para el ministro de relaciones exteriores Robert Stewart, vizconde de Castlereagh:

"Cinco años de repetidas experiencias han hecho ver de un modo indudable a todos los hombres de juicio y opinión, que este país no está en edad ni estado de gobernarse por sí mismo, y que necesita una mano exterior que lo dirija y contenga en la esfera del orden antes que se precipite en los horrores de la anarquía. Pero también ha hecho conocer el tiempo la imposibilidad de que vuelva a la antigua dominación, porque el odio a los Españoles, que ha excitado su orgullo y opresión desde el tiempo de la conquista, ha subido de punto con los sucesos y desengaños de su fiereza durante la revolución."

ingleses

Lord Castlereag fue el ministro de Exteriores británico, desde 1812 fue fundamental para la gestión de la coalición que derrotó a Napoleón y fue el principal diplomático británico en el Congreso de Viena. Castlereagh fue también líder de la Cámara de los Comunes británica durante el gobierno de Robert Jenkinson desde 1812 hasta su muerte. 

Lord Strangford recibió a Manuel José García, enviado por Carlos María de Alvear a ofrecer a Inglaterra nada menos que la entrega total del Río de la Plata como colonia inglesa. Strangford no sabía qué hacer con semejante ofrecimiento y pidió desesperadamente instrucciones a Londres. Por orden del ministerio británico, que prefirió mantener la paz con España, convenció a García de no entregar las notas al primer ministro británico; por las dudas, le impidió salir de Río con destino a Londres. Es que los ingleses consideraban que el fin de la independencia de América era sólo una cuestión de tiempo. Las negociaciones entre el Río de la Plata e Inglaterra, desde entonces, pasaron directamente por los embajadores argentinos en Londres.


 

"La sola idea de composición con los Españoles los exalta hasta el fanatismo, y todos juran en público y en secreto morir antes que sujetarse a la Metrópoli. En estas circunstancias solamente la generosa Nación Británica puede poner un remedio eficaz a tanto males, acogiendo en sus brazos á estas Provincias que obedecerán su Gobierno, y recibirán sus leyes con el mayor placer, porque conocen que es el único medio de evitar la destrucción del país, á que están dispuestos antes que volver á la antigua servidumbre, y esperan de la sabiduría de esa nación una existencia pacífica y dichosa. Yo no dudo asegurar á V.E., sobre mi palabra de honor, que éste es el voto y objeto de las esperanzas de todos los hombres sensatos, que son los que forman la opinión real de los Pueblos; y si alguna idea puede lisonjearme en el mando que obtengo, no es otra cosa que la de poder concurrir con la autoridad y el poder a la realización de esta medida toda vez que se acepte para la Gran Bretaña. Sin entrar en los arcanos de la Política del Gabinete Inglés, yo he llegado a persuadirme que el proyecto no ofrece grandes embarazos en la ejecución."

"Estas provincias desean pertenecer a Gran Bretaña, recibir sus leyes, obedecer su gobierno y vivir bajo su influjo poderoso. Ellas se abandonan sin condición alguna a la generosidad y buena fe del pueblo inglés y yo estoy resuelto a sostener tan justa solicitud para librarlas de los males que las afligen. Es necesario se aprovechen los momentos; que vengan tropas que impongan a los genios díscolos y un jefe plenamente autorizado para que empiece a dar al país las formas que sean de su beneplácito, del rey y de la nación a cuyos efectos espero que V.E. me dará sus avisos con la reserva y prontitud que conviene para preparar oportunamente la ejecución…"

"Inglaterra no puede abandonar a su suerte a los habitantes del Río de la Plata en el acto mismo que se arrojan en sus brazos generosos..."

"Yo deseo que V.E. se digne escuchar mi enviado, Dn. Manuel García, acordar con él lo que V.E. juzgue conducente y manifestarme sus sentimientos, en la inteligencia que estoy dispuesto á dar todas las pruebas de sinceridad de esta comunicación, y tomar de consuno las medidas que sean necesarias para realizar el proyecto, si en el concepto de V.E., puede encontrar acogida feliz en el ánimo del Rey y la Nación. Dios Guíe á V.E. Ms As. Bs. Ays. E° 25 de 1815. Carlos de Alvear. "

El sentido de estas cartas muestra la intención de Alvear de solicitar un protectorado británico para las Provincias del Río de la Plata, aunque algunos historiadores han puesto en duda las verdaderas intenciones de Alvear.​ Excepto los abundantes panegiristas de Alvear, estas cartas pueden ser consideradas como un gesto de traición a la patria, si a ella se la entiende como una nación independiente de toda dominación extranjera y no solamente de la corona española.

García se reunió en secreto con Strangford a principios de 1815; no le entregó ninguna de estas dos cartas, pero le permitió leerlas.Strangford le aconsejó cambiar el texto de las cartas por otro más acorde con la nueva situación de alianza de Inglaterra con Fernando VII. Las cartas dirigidas por el Director Alvear a Lord Strangford no llegaron nunca a destino, dado que, Manuel García fue interceptado por Belgrano y Rivadavia, que retornaban de Europa y le hicieron desistir de cumplir con su misión.