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En 1923, realizó el primero de
sus cinco intentos de cruzar el Río de la Plata y, en 1932, en su legendario
yate Legh, navegó durante 74 días para cruzar el Atlántico, desde Archacon,
Francia, hasta Buenos Aires donde llegó el 13 de abril de ese mismo año. Sin
embargo, faltaba completar la hazaña más grande, la más
"solitaria". El 27 de junio de 1942, Vito Dumas zarpa del puerto de
Buenos Aires a bordo de su embarcación Legh II (9,55 m de eslora y 3,30 de
manga) con un objetivo claro y preciso: dar la vuelta al mundo solo. Después
de 272 días de travesía, de pasar por los 4 puntos de las etapas, Ciudad del
Cabo, Wellington, Valparaíso y Mar del Plata y de atravesar el temible Cabo
de Hornos, "El Navegante Solitario" cumple el sueño de un país que
lo recibe con los brazos abiertos el 7 de agosto de 1943. Posteriormente, se
traza otro objetivo no menos desafiante: unir los puertos de Buenos Aires y
Nueva York, proeza que logra en 1955.
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