Fue creado con el objeto de resguardar un sector representativo de los bosques de la región andino patagónica, junto a una porción de ambientes de la Estepa Patagónica , y un área de transición entre ambos ambientes. También protege dos importantes cuencas lacustres y nacientes de ríos, junto a valiosos yacimientos paleontológicos y arqueológicos. |
Aunque lleva el nombre del pionero de los Parques Nacionales argentino, el Parque Perito Moreno es una de las áreas protegidas menos visitadas y conocidas de la región andino-patagónica. Su particular ubicación geográfica que abarca regiones montañosas cortadas por valles ubicados a 900 metros sobre el nivel del mar, le confieren una rigurosidad climática que lo hacen poco hospitalario al visitante.
Quizás este motivo, junto a su dificultoso acceso hizo que permaneciera olvidado durante muchos años. Durante todo el año la región es barrida por los gélidos vientos del oeste, que luego de pasar por las altas cumbres descienden a los llanos, manteniendo temperaturas que rara vez superan los 15ºC en verano y en invierno bajan hasta los -30ºC .
La nieve cubre en invierno cerros y valles y aún en verano blanquea los cerros cercanos. El paisaje del Parque está compuesto por una serie de encadenamientos montañosos que se escalonan de oeste a este, definiendo un anfiteatro natural. Este escenario pétreo domina la planicie que se extiende desde la portada del Parque, donde se instala el ambiente de la Estepa Patagónica , hasta la margen oriental de los primeros lagos, donde comienzan a manifestarse los bosques andino-patagónicos.
Dos importantes cuencas lacustres ocupan la mayor parte del área. Una de ellas es la del Lago Belgrano, que desagua en el Océano Pacífico a través de una compleja red hidrográfica que conecta los Lagos Mogote, Península, Volcán, Azara, Escondido y Nansen, así como los Ríos Volcán, Cabrera, San Lorenzo, Penitente, Lácteo, etc..
La otra cuenca es la del Lago Burmeister, que a través de los Ríos Roble, Belgrano y Chico, luego de cruzar toda la Patagonia , desagua por el estuario del Río Santa Cruz en el Océano Atlántico. Además de amparar hermosos paisajes y la vida silvestre nativa, este Parque es uno de los más ricos en yacimientos arqueológicos. Protege expresiones culturales de los antecesores de los Tehuelches, que han quedado plasmadas en la forma de pinturas rupestres en las cavernas y aleros del Cerro Casa de Piedra. |