| Funcionó 
              en este barrio durante 50 años, el famoso Mercado de Abasto. Su 
              última "aparición en público" si así se puede hablar de 
              este histórico mercado, fue en 1987, cuando Luciano Pavarotti, grabó 
              para la RAI un programa especial desde ese lugar, donde cantó "Canción 
              de Buenos Aires" y bailó el tango con la desaparecida Beba 
              Bidart. Actualmente restaurado es un moderno centro comercial que 
              cuenta con cientos de locales, un gran patio de comidas, etc. Cuentan que en abasto 
              nació el juego de la quiniela, siendo Don José Betronila, el primer 
              quinielero y levantador del juego desde su cigarrería de la calle 
              Corrientes. 
             En cuanto a personajes, 
              el más famoso "el Morocho del Abasto", "Zorzal Criollo" 
              o "El Jilguero de Balvanera", como solía llamarse al gran 
              Carlitos Gardel..Vivió con su madre en la casa de la calle Rincón 
              137. Era habitué del café O Rondeman (de la familia Traverso),lugar 
              pendenciero (Aguero 524), frecuentado por gente de la política, 
              y de la calle, allí cantaban Gardel y Razzano, otro vecino del barrio. 
              " La Casa de Carlos Gardel", está en Jean Jaurés 735. 
              Fue propiedad del cantor y hoy es una tanguería donde se disfrutan 
              espectáculos tangueros. 
             En el bar Garibotto 
              de Pueyrredón y San Luis tenía su paradero el acordeonista Villoldo, 
              autor del famoso "El Choclo". También fue frecuentado 
              el café por Enrique Cadícamo. Otras figuras populares que allí se 
              reunían fueron: Pepe Arias, el compositor Lucas Demare y el poeta 
              lunfardo Carlos Muñoz. Visitantes del barrio 
              eran Jorge Luis Borges y Macedonio Fernández, quienes se reunían 
              muy frecuentemente a tomar un café en La Perla del Once, en Rivadavia 
              y La Rioja. Osvaldo Fresedo era 
              otro visitante y admirador de este barrio al que le dedicó el tango 
              "El Once". La " Madre María", 
              cuyo verdadero nombre era Salomé Loredo y Otaola, vivió en la calle 
              Rioja 771 y se hizo muy famosa por sus dotes de curandera y vidente. 
              Hasta el día de hoy es venerada por mucha gente. |