Las elecciones presidenciales de Argentina de septiembre de 1973 fueron llevadas a cabo el domingo 23 de septiembre de 1973. Las mismas se realizaron como consecuencia de las renuncias simultáneas del presidente Héctor J. Cámpora y el vicepresidente Vicente Solano Lima y tuvieron como fin elegir al presidente y vicepresidente para el período 1973–1977. Se realizaron bajo el texto constitucional establecido por la dictadura autodenominada Revolución Libertadora, con las modificaciones establecidas por el Estatuto Fundamental Temporario de 1972, impuesto por la dictadura autodenominada Revolución Argentina, estableciendo el voto directo del presidente y una segunda vuelta electoral entre los tres candidatos más votados, si ninguno obtenía la mayoría absoluta.
El vencedor fue Juan Domingo Perón, candidato del FREJULI, un frente integrado por peronistas, frondizistas, conservadores populares, demócrata cristianos y socialistas, con el 61.85% de los votos, que resultó electo para su tercer mandato, luego de haber sido derrocado y obligado al exilio en 1955, perseguido penalmente y proscripto en las elecciones de 1958, 1963 y marzo de 1973. Como vicepresidenta fue elegida María Estela Martínez de Perón, también del Partido Justicialista. En segundo lugar salió Ricardo Balbín de la Unión Cívica Radical, con 24.42%, en tercer lugar quedó Francisco Manrique, de la Alianza Popular Federalista, con el 12.19%, y en último lugar Juan Carlos Coral, del Partido Socialista de los Trabajadores, con el 1.54%. Con tan solo cuatro fórmulas, los comicios de septiembre de 1973 fueron las elecciones presidenciales con menos candidatos desde la instauración del sufragio universal en 1947.
Estas elecciones se caracterizaron por ser la primera vez en la historia latinoamericana que una fórmula integrada por una mujer resultaba electa. La fórmula vencedora obtuvo el segundo mayor porcentaje de sufragios desde la implantación del sufragio secreto y obligatorio, ocupando el primer lugar también Perón en las elecciones de 1951.
Perón no finalizó el mandato constitucional debido a que falleció el 1 de julio de 1974, siendo sucedido por la vicepresidenta María Estela Martínez de Perón, quien tampoco finalizó el período ya que fue derrocada por el golpe de Estado del 24 de marzo de 1976.
Primavera Camporista
El clima de júbilo general que siguió a la restauración de la democracia el 25 de mayo de 1973, al celebrarse las elecciones de marzo donde se permitió la candidatura peronista de Héctor José Cámpora (si bien la dictadura de la Revolución Argentina, gobernante durante casi siete años, impidió la candidatura del propio Juan Domingo Perón), fue pronto nublado por fricciones políticas y acontecimientos imprevistos. El presidente Héctor Cámpora, que fue juramentado en presencia del Presidente de Cuba Osvaldo Dorticós Torrado y el Presidente de Chile Salvador Allende, ambos representantes del marxismo en la Latinoaméricade la Guerra Fría,2 declaró una amnistía casi total para los varios cientos de presos políticos detenidos por el régimen de Alejandro Lanusse, muchos en campamentos inhóspitos como el de Trelew, lugar donde se dio una ejecución masiva en 1972.
Durante su corto mandato, Cámpora realizó nombramientos polémicos: destacándose a Rodolfo Puiggrós como intervertor de la Universidad de Buenos Aires, Esteban Righi como Ministro del Interior y Julio Troxler como Jefe Auxiliar de Policía de Buenos Aires, todos abogados defensores vinculados a los sectores de la izquierda violenta del peronismo, como la organización guerrillera Montoneros. Otros abogados de izquierda también fueron elegidos gobernadores en todo el país, entre ellos Oscar Bidegain (Provincia de Buenos Aires), Ricardo Obregón Cano (Córdoba) y Alberto Martínez Baca (Mendoza), entre otros. Este nuevo ascenso de la izquierda argentina provocó una reacción cada vez más violenta por parte de los sectores más duros de la derecha. Entre los nombramientos de este sector destaca José López Rega que, por presión del propio Perón, fue investido Ministro de Bienestar Social.
Una vez en el puesto de Ministro de Bienestar Social, López Rega utilizó más de un 30% del presupuesto nacional para financiar la creación y operación de la Alianza Anticomunista Argentina (Triple A), una organización paramilitar. Amenazados por las incursiones de los Montoneros en las organizaciones estudiantiles y vecinales, los gobiernos locales y la Juventud Peronista, comenzaron a apuntar a muchos de los miembros izquierdistas del gabinete de Cámpora, algunos de los cuales comenzaron a renunciar bajo la presión del propio Perón. Mientras tanto, Cámpora viajó a España para acompañar a Perón en su inminente retorno a la Argentina, el 20 de junio de 1973. El vuelo de Perón estaba destinado a aterrizar en Ezeiza, pero mientras se preparaba el palco donde el expresidente hablaría, se desató un tiroteo entre la derecha y la izquierda peronista que causó la muerte de trece personas y al menos 365 heridos, conociéndose a este hecho como la Masacre de Ezeiza.
Renuncia de Cámpora e interinato de Lastiri
El 12 de julio el vicepresidente Vicente Solano Lima anunció públicamente que él y el presidente Cámpora firmarían sus renuncias al día siguiente y que habría nuevas elecciones, bajo el argumento de que el verdadero candidato del Frente Justicialista de Liberación había sido Perón, y que el único objetivo de su candidatura había sido permitir su retorno. Al día siguiente Cámpora y Solano Lima presentaron sus renuncias ante el Congreso Nacional reunido en Asamblea Legislativa (ambas cámaras juntas), que aprobó las mismas y le tomó el juramento constitucional como presidente de la Nación a Raúl Lastiri.
Lastiri había llegado a la Presidencia sin ser Presidente Provisional del Senado, que era el sucesor constitucional del Presidente y el Vicepresidente, debido a que López Rega intervino en dicha sucesión y presionó a Perón para embarcar a Díaz Bialet (el Presidente Provisional del Senado en ese momento) en el primer avión rumbo a Europa a cargo de una misión inexistente, con el fin de que Lastiri, que era su yerno y un acérrimo anticomunista, fuera quien ostentara el Poder Ejecutivo hasta la elección de Perón.6 Sin embargo, el cauteloso Lastiri continuó con las políticas socioeconómicas populistas de Cámpora; heredando una creciente amenaza de una Juventud Peronista cada vez más armada y el recién activado Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), que en solo tres meses había atacado una instalación militar y asesinado a varias figuras militares. Lastiri reemplazó al Ministro del Interior Righi, siendo este el único nombramiento importante su presidencia provisoria. El 20 de julio, el Gabiente se reunió a deliberar y anunció la convocatoria a elecciones presidenciales para el domingo 23 de septiembre, realizándose al mismo tiempo que la segunda vuelta gubernativa en las elecciones provinciales de Santiago del Estero (en suspenso desde abril). En la reunión también se definió que los cargos electos asumirían el 12 de octubre, y que se emplearía el mismo sistema electoral que en las elecciones de marzo.
Campaña de 1973 para las elecciones de septiembre de 1973 en las que Perón llegará a su tercer mandato
Afiche del candidato a presidente de la UCR , Ricardo Balbín con el 21% de los votos el radicalismo pierde la elección.
Frente Justicialista de Liberación
La futura candidatura presidencial de Juan Domingo Perón había quedado definida prácticamente desde que se convocó a las elecciones de marzo de 1973, pero la cláusula que exigía que los candidatos presidenciales debían fijar su domicilio en Argentina para el 25 de agosto de 1972 había funcionado, en la práctica, como una estratagema para impedir que Perón se presentara como candidato. Unos meses más tarde, sin embargo, la creciente violencia había convencido a gran parte de la élite política y militar, incluso sectores antiperonistas, de que para entonces solo Perón reunía el suficiente respeto como para convencer a las guerrillas extremistas de poner fin a las hostilidades sin comprometer al gobierno constitucional. Además de esto, y a pesar de la certeza absoluta de que Perón ganaría aplastantemente cualquier elección a la que se presentara, su salud había comenzado a flaquear por entonces y era de público conocimiento dentro del ámbito político que, si resultaba electo, moriría sin poder terminar su mandato. Por otro lado, la situación regional no era propicia para establecer un régimen democrático en Latinoamérica. Los únicos dos gobiernos democráticos que había en el Cono Sur a parte del argentino (Uruguay y Chile) fueron derrocados en sucesivos golpes de estado el 27 de junio y el 11 de septiembre respectivamente, instaurándose dictaduras militares. Estos escenarios inestables dejarían al gobierno argentino en una situación muy complicada una vez que Perón muriera, por lo que una candidatura vicepresidencial estable y con peso político era trascendental para garantizar la subsistencia de la próxima administración.
Sin embargo, la elección del compañero de fórmula de Perón fue sumamente difícil por la fractura creciente del justicialismo entre un sector ortodoxo, más vinculado a la derecha política, de carácter anticomunista, y a un sector claramente contrario que se identificaba mucho con la izquierda y la extrema izquierda. A este último sector, al que pertenecía el ex presidente Cámpora, se lo conocía como Tendencia Revolucionaria o La Tendencia y había jugado un papel importante en la campaña electoral del FREJULI en marzo. Durante las conversaciones para la fórmula del frente oficialista de cara a septiembre, Perón rechazaba la idea de una fórmula netamente justicialista, y buscó hasta el último momento alcanzar una lista conjunta con la Unión Cívica Radical (UCR), con Ricardo Balbín como candidato a vicepresidente, en un intento de juntar a las dos mayores fuerzas políticas de la Argentina y poner fin a la inestabilidad. Esta iniciativa, que fue absolutamente rechazada por parte de la dirigencia justicialista y casi la totalidad de la radical, acabó colapsando y se debió buscar otra figura.
La crisis interna del peronismo se agravaba por momentos con el recrudecimiento de la violencia. El 21 de julio de 1973, al día siguiente de que se anunciara la fecha de las elecciones, la Juventud Peronista (JP) y distintas organizaciones aledañas: la Juventud Universitaria Peronista (JUP), la Unión de Estudiantes Secundarios (UES), la Juventud Trabajadora Peronista (JTP), los Montoneros y las Fuerzas Armadas Revolucionaras (FAR), realizaron una masiva movilización que se dirigió a la Quinta de Olivos, donde se encontraban reunidos Lastiri y Perón. La manifestación fue pacífica y sin incidente alguno, y se trataba de una concentración de apoyo a la candidatura presidencial del líder justicialista. En la residencia presidencial, Perón se reunió durante poco más de ochenta minutos con delegados de las organizaciones juveniles y manifestó su deseo de mantener contacto directo con dichas agrupaciones, enviando un comunicado en el que aseguraba su intención de continuar la comunicación a pesar de la prescripción médica que le impedía formar parte de las movilizaciones10 Sin embargo, al día siguiente, se publicó el nombramiento de José López Rega como "intermediario entre Perón y la JP", en contraposición a la promesa de "contacto directo" emitida por Perón. Este supuesto nombramiento provocó un rechazo generalizado de la JP, que lo desconoció tajantemente. Simultáneamente, sin embargo, López Rega declaró que se reuniría en la Casa Rosada con representantes de las agrupaciones. Al día siguiente, el Ministro del Interior, Benito Llambí, emitió un comunicado llamando a las organizaciones juveniles y a las guerrillas a la calma, exigiendo que las cosas a partir de entonces debían dirimirse en las elecciones y que "todos tendrían derecho a votar y ser elegidos", acusando a los grupos extremistas de buscar mantener "choques inútiles" con el único fin de desestabilizar el país.
El 27 de julio, durante un homenaje a Eva Perón en conmemoración a los veintiún años de su fallecimiento, el Movimiento Nacional Justicialista proclamó la candidatura de Perón a la presidencia, sin que se especificara quien sería su compañero de fórmula. A finales del mismo mes, la idea de una fórmula Perón - Isabel de Perón fue discutida por los medios de comunicación y el 31 de julio, el ex presidente Cámpora declaró públicamente que la idea estaba siendo barajada. A parte del propio Perón, la única figura del PJ que no se encontraba inclinada de manera pública por ninguno de los dos sectores del justicialismo era su esposa, María Estela Martínez de Perón, apodada Isabel, que carecía completamente de experiencia política. López Rega, el Ministro de Bienestar Social, disipó las dudas de Perón sobre la posible candidatura de su mujer, a la que el líder se oponía tajantemente, bajo el argumento de que no quería exponerla a la situación en la que se vería si él moría en el cargo. Sin embargo, López Rega recomendó la candidatura de Isabel, disipando las dudas de Perón sobre dicha elección. Finalmente, la proclamación de la fórmula Perón - Perón se realizó el 5 de agosto de 1973 en el Teatro Colón
Boletas pertenecientes al FREJULI de la fórmula Perón-Perón y de la Union Cívica Radical de Balbín y De la Rua