Usos del agua

En las últimas décadas el uso del agua ha aumentado en relación a la cantidad de ella disponible. Más del 60% de la extracción de agua a nivel mundial se destinó al riego de cultivos y el 23% a usos de la industria.

El agua como fuente de suministro

Las aguas superficiales constituyen la fuente de abastecimiento más frecuente, ya sea para suministro público, riego agrícola, actividades industriales y ganaderas u otros usos. Desde esta perspectiva , las exigencias de calidad con las posibles utilidades y la disponibilidad de caudales suficientes constituyen importantes puntos de referencia. La regulación de este recurso, mediante la utilización de embalses, en mejora de la disponibilidad cuantitativa, puede modificar sustancialmente su calidad química y biológica si no se controla el posible deterioro de los atributos estéticos y de conservación de la vida en el agua o eutrofización.

La disponibilidad de agua para suministro y las posibilidades como medio de transporte que ofrecen los cursos superficiales de agua han propiciado el desarrollo de asentamientos urbanos. Asimismo, la obtención de alimentos por medio de la pesca, el riego agrícola y la ganadería han favorecido históricamente el desarrollo urbano, agrícola e industrial en el entorno de los cursos superficiales de agua. Aunque el volumen de agua generalmente aconsejado para el consumo humano directo es de dos litros por habitante y día, el gasto del elemento por persona no se limita a esa cantidad. La dotación de agua mínima recomendada por la reglamentación técnica española para el suministro doméstico es de cien litros por habitante y día, las dotaciones de agua más frecuentes en las grandes ciudades se sitúan entre ciento cincuenta y doscientos litros por habitante y día. Esta asignación urbana incluye tanto el consumo doméstico como los industriales, de riego y las llamadas pérdidas de la red de suministro. Por otro lado, el consumo de agua que hace la industria es muy variable y depende del tipo de actividad y del grado de modernidad de las instalaciones.

Recursos convencionales

Los recursos convencionales hídricos se refieren a las aguas que dentro del ciclo del agua corresponden a las superficial( y a las subterráneas.

Las aguas superficiales son las de n'os, lagos, torrentes y marismas. La mayor parte de estas aguas es dulce. Pero existe agua salada en lagos y en las marismas que forman las lagunas costeras.

Las aguas subterráneas son aquellas que están almacenadas en el subsuelo o circulan lentamente por( Proceden de la infiltración en el terreno de las aguas de lluvia, deshielo, ríos, lagos. Cuando el agua filtrada encuentra una superficie impermeable que la retiene, forma un depósito subterráneo llamado acuífero.


Recursos no convencionales

Los recursos hídricos no convencionales son las aguas recicladas y las desaladas. El agua puede volver a servir si se reintegra a su medio después de haber sido utilizada, Por ejemplo, en zonas costeras se puede desalar el agua de mar, lo que supone un complemento para cubrir las necesidades de agua en ciertas zonas donde no abunda.

Los lechos naturales o artificiales de agua constituyen un excelente medio de transporte muy utilizado en los países industrializados del hemisferio norte.

La consideración del agua como un medio físico para transportar y deshacerse de un buen número de residuos de sus usuarios ha hecho que el equilibrio físico, químico y biológico de ésta se vea ampliamente superado en ciertas condiciones, y que llegue a un nivel de deterioro inaceptables en ciertos casos.

El concepto de autodepuración vendría de esta manera a de designar la capacidad de un medio natural, en este caso las aguas superficiales, de aceptar una cierta aportación de sustancias o energía, sin llegar a experimentar modificaciones significativas de su calidad. La controversia surge cuando se entra a analizar el grado de significación de las modificaciones, como por ejemplo de las que afectan al oxígeno disuelto, la productividad biológica o el enriquecimiento de determinadas sustancias.

Usos consuntivos

Los usos consuntivos son aquellos en los que se realiza la extracción de agua de su lugar de origen para facilitar su consumo.

Casi toda el agua que se utiliza en los usos consuntivos procede de los recursos hídricos naturales: lagos, ríos y agua subterránea.

Usos no consuntivos

Los usos no consuntivos son aquellos que consisten en el consumo de agua en su lugar de origen.

  • Usos energéticos. Principalmente para la producción de energía eléctrica. Los saltos de agua son un sistema muy eficaz para producir energía electrica.
  • Navegación. Este transporte de mercancías y de personas permite la comunicación entre países y continentes.
  • Usos recreativos. Agua de embalses, ríos y mares para numerosas actividades deportivas, como navegación a vela, remo o motor. También los campings y los lugares para acampar se ubican cerca de la cuenca de los ríos o en las playas.
  • La pesca. Se considera la extracción de peces con fines comerciales y recreativos.
  • Usos ambientales. Los ecosistemas acuáticos necesitan un aporte de agua mínimo.
  • Usos agrarios. El consumo agrícola s'é debe al riego de los campos de cultivo y supone el mayor porcentaje de consumo en el mundo. Las necesidades de agua dependen directamente del clima, el tipo de suelo y los tipos de cultivo de cada zona.
  • Usos ganaderos. Engloba los requerimientos de agua para la alimentación de los animales y para su adecuado desarrollo como la limpieza, la refrigeración y la humectación ambiental.
  • Usos municipales. El abastecimiento urbano abarca las necesidades de agua de las viviendas, es decir, el uso doméstico, y el de comercios, centros y servicios públicos.
  • Usos industriales y mineros. El agua que se utiliza en la industria se aprovecha como materia prima, refrigerante, depósito de vertidos y agente de transporte. En la minería, el agua se usa para separar los minerales de las rocas.
Una adecuada gestión del agua debe integrar los recursos superficiales y subterráneos y adaptados a las demandas existentes.

Una adecuada gestión del agua debe integrar los recursos superficiales y subterráneos y adaptados a las demandas existentes.



Planta desalinizadora.

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Gracias a estas instalaciones se puede potabilizar el agua marina.



Las implicaciones de llevar el agua a las ciudades

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Riego por goteo

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El riego por goteo reduce el consumo agrario del agua, en comparación con el riego «a manta», que consiste en la inundación de la parcela.