La tundra es un tipo de bioma que se encuentra entre los bosques al sur del océano Ártico y los casquetes polares de hielo al norte, es una banda circumpolar de unos 20.000 kilómetros de tierra desnuda llamada tundra ártica. También existen regiones similares a partir del límite superior de bosque en las cumbres montañosas llamadas tundras alpinas.
También existe el bioma de tundra en la Antártida, la tundra antártica. Aunque este continente carece de vegetación y de un ecosistema de tundra tal y como los anteriores en la Península Antártica se dan algunas condiciones favorables. En este lugar, hay zonas que en verano están descubiertas de hielo por lo que pueden encontrarse líquenes y plantas hepáticas. Las costas también son otro lugar donde puede encontrarse este bioma. No hay una fauna de grandes mamíferos salvo focas, y también pueden encontrarse poblaciones de focas.
La taiga es el bioma terrestre que concentra las mayores masas forestales del planeta. En algunos países como Canadá lo llaman bosque boreal y para para nombrar a la zona más próxima a la tundra utilizan el término taiga.
Es la mayor masa forestal del planeta y está compuesta en su mayor parte por coníferas, son las grandes masas forestales del hemisferio Norte. En el hemisferio sur no existe taiga, sino «bosque subpolar magallánico» y ocupa una muy reducida extensión de tierra.
Bosque caducifolio es aquel que se encuentra en un bioma formado por árboles y plantas que pierden sus hojas todos los años debido a la temporada invernal fría y seca. Los árboles del bosque caducifolio se renuevan en la temporada cálida y lluviosa, de clima continental húmedo.
La Tierra tiene bosques caducifolios templados y bosques caducifolios tropicales y subtropicales, también conocidos como bosques secos, que proporcionan un espectáculo visual maravilloso, de plenitud porque prodigan mucha paz y armonía cromática.
Los bosques de temperaturas frías tienen precipitaciones abundantes durante todo el año, hasta 1500 mm anuales. En este bioma hay precipitaciones en verano, estación en la cual es máxima la evapotranspiración y mayor la demanda de agua del suelo, mientras que en primavera hay un excedente de agua en el suelo.
Los árboles que se encuentran dentro de estos biomas, por lo general, tienden a perder sus hojas durante la estación seca y vuelven a crecer al inicio de la temporada lluviosa.
Se llama bosque mediterráneo, durisilva o matorral mediterráneo a un bioma boscoso y de matorrales frecuente en las regiones que presentan un clima mediterráneo, o sea, un clima semejante al de las inmediaciones del mar europeo del mismo nombre.
Este tipo de bosques datan de épocas muy antiguas, y han sobrevivido a los eventos de formación de la región mediterránea (a partir del Mar de Tetis en el período Mesozoico). Por otro lado, también resistieron la intervención del ser humano, que ha jugado un rol importante en la conformación de su biocenosis.
Sin embargo, el bosque mediterráneo es altamente sensible a la desertificación, si se destruye la capa vegetal, dado que es un tipo de bioma árido, de vegetación xerófila (adaptada al medio seco) y poca biodiversidad.
Actualmente, existen numerosas iniciativas de protección de estos bosques, amenazados además por el cambio climático, cuyos resultados sin embargo no parecen muy alentadores: un crecimiento de apenas 2% entre 2010 y 2015, según cifras de la ONU.
Las praderas es otro de los grandes biomas terrestres, uno de los biomas más importantes. Las precipitaciones en las praderas son intermedias entre las del desierto y las zonas boscosas, son entre 250 y 600 litros por metro cuadrado de precipitación media, dependiendo de la temperatura, la distribución estacional de la lluvia y la capacidad del suelo para mantener la humedad.
Las praderas tropicales pueden llegar a recibir más de 1200 litros concentrados en la estación lluviosa que alterna con una prolongada estación seca. La humedad del suelo es limitante de la descomposición microbiana y del reciclado de nutrientes.
Hay grandes praderas en los continentes euroasiático y norteamericano.
La forma biológica dominante son las gramíneas, desde especies altas hasta las enanas, agrupadas en manojos o formando céspedes. Una comunidad de pradera bien desarrollada contiene diversas especies adaptadas a distintas temperaturas, un grupo crece durante la parte más fría de la estación de crecimiento y el otro crece durante el período más caluroso. Así la pradera compensa los cambios de temperatura. El matorral (plantas no herbáceas) suele ser un componente importante y también pueden hallarse plantas leñosas como árboles o arbustos, frecuentemente formando cinturones o grupos a lo largo de los cursos de agua.
Una variante de la pradera es la sabana tropical, donde los característicos árboles de copa alta en forma de sombrilla están ampliamente esparcidos por la pradera.
Las plantas herbáceas tienen una vida corta y se acumula gran cantidad de materia orgánica en el suelo, siendo la primera fase de la descomposición muy rápida con poca hojarasca pero mucho humus. La humificación es rápida pero la mineralización es lenta. Los suelos de praderas contienen de 5 a 10 veces más humus que los forestales. Los suelos de pradera oscuros son más adecuados para el crecimiento de las principales plantas comestibles como el maíz y el trigo.
El papel del fuego en las praderas es mantener la vegetación de pradera en competencia con la vegetación forestal.
Un rasgo característico es la existencia en las praderas de grandes herbívoros que en su mayoría son mamíferos como el bisonte, antílope y los canguros. Existen dos formas biológicas: tipo corredor como los anteriormente mencionados y los tipo zapador o excavador como las ardillas terrestres y los perritos de las praderas.
Dos grandes problemas de las praderas son el sobrepastoreo y el exceso de labranza.Como resultado del sobrepastoreo prosperan los matorrales espinosos que antes se mantenían bajo control gracias a los incendios
Las sabanas son praderas tropicales con una pequeña cantidad de árboles o arbustos dispersos. Se desenvuelven en regiones de alta temperatura, que tienen marcada diferencia entre las estaciones seca y húmeda. En la estación húmeda el crecimiento es rápido, pero se secan y bajan en calidad durante la estación seca.
Las sabanas tropicales cubren áreas extensas en América del Sur, África, India, Sudeste Asiático y Australia Septentrional.
En África, la sabana es el hogar de grandes mamíferos herbívoros (cebras, ñus, antílopes, elefantes) que son controlados por grandes carnívoros, tales como leones, leopardos y chitas. Los restos de las víctimas de esos predadores son removidos por hienas y buitres. El fuego regular es importante para este sistema, de él depende la manutención de las praderas en lugares donde las manadas no son tan numerosas.
El crecimiento animal y vegetal en la sabana tropical, depende de las distintas alteraciones periódicas. Los grandes animales emigran en busca de agua, y sus ciclos reproductivos corresponden a la disponibilidad de crecimiento de nuevas plantas suculentas.
Este bioma esta compuesto por dos tipos de vegetación: Desierto frío y Desierto cálido.
Presentan temperaturas promedio que varían entre los 7 y los 11ºC y precipitaciones anuales entre los 130 y 340 mm, dependiendo de la zona.
En el Desierto frío las formas de vida dominante son las geófitas y las caméfitas, la cobertura es muy baja y se puede observar solo un estrato. La función es caducifolia y el tipo de hoja es en su mayoría graminiforme de tamaño pequeño. Esta vegetación permanece activa en los meses estivales.
El Desierto cálido presenta en su mayoría caméfitas y terófitas y al igual que el desierto frío la cobertura es muy baja. La vegetación se dispone verticalmente en dos estratos y la función es caducifolia y áfila. El tipo de hoja predominante es la coriácea. Las zonas en donde este tipo de vegetación se encuentra se caracterizan por la erosión hídrica y eólica y las lluvias torrenciales.
La selva tropical también llamada bosque tropical es un cinturón verde que se encuentra ubicado sobre la línea del Ecuador. Entre sus cualidades principales se identifican sus elevadas temperaturas medias, así como también por sus abundantes precipitaciones, que son constantes a lo largo de los meses, que pueden alcanzar los 5000 mm en un solo año, además de contar con una densa vegetación. Ecuador, Brasil, Colombia, México, Australia, China, Perú, India, Filipinas o Madagascar son algunos de los países que cuentan con este bioma.
Si bien es cierto que no ocupan buena parte de la superficie terrestre –se calcula que representan cerca del 5 por ciento del total-, la selva tropical cumple varias funciones que son clave para el planeta. En primer lugar, este cinturón verde, que se encuentra sobre todo en la cuenca del Congo, la Amazonía y el sudeste asiático, es el hábitat de millones de especies, tanto animales como vegetales, que se encuentran en enormes cantidades.
Además, la importancia de la selva tropical tiene que ver con la cantidad de carbono que logra almacenar, lo cual resulta indispensable para evitar la erosión de los suelos. Y, por último, este cinturón verde ayuda al equilibrio del clima y al hídrico.