Históricamente, esta energía se ha empleado, por ejemplo, para mover barcos o para moler grano en los molinos. Ahora se usa también para generar energía eléctrica. La energía eólica es la energía que se obtiene a partir del viento, es decir, es el aprovechamiento de la energía cinética de las masas de aire.
La energía eólica no es algo nuevo, es una de las energías más antiguas junto a la energía térmica. El viento como fuerza motriz se ha utilizado desde la antigüedad. Así, ha movido a barcos mediante el uso de velas o ha hecho funcionar la maquinaria de los molinos al mover sus aspas. Sin embargo, tras una época en la que se fue abandonando, a partir de los años ochenta del siglo xx este tipo de energía limpia experimentó un renacimiento.
Los vientos son una manifestación indirecta de la energía solam El viento se produce por el diferente calentamiento de una región con respecto a otra; debido a esto, el aire caliente de la primera región, por ser más ligero que el aire frío. se eleva, dejando un hueco, que es rellenado por aire más frío que procede de la otra región. El aire frío en su desplazamiento es lo que conocemos como viento.
La energía eólica es inagotable, gratuita y no contamina; pero presenta el inconveniente de que es intermitente. Además, la energía que transportan los vientos es mucho menor que la irradiada por el Sol. Por ello, esta energía se considera como energía menor, puesto que puede suplir alguna falta de energía, pero nunca podrá ser una gran fuente de abastecimiento para la humanidad.
En las centrales eólicas se aprovecha la energía del viento (cinética), que se transforma en energía eléctrica en unos aparatos llamados aerogeneradores. El viento mueve las aspas, y este movimiento se transmite mediante una serie de engranajes a un generador eléctrico.
El mayor inconveniente de estas instalaciones es el fuerte condicionante geográfico: las centrales eólicas solo son rentables en zonas en las que el viento es intenso con regularidad.
Al igual que las centrales solares, las centrales eólicas no emiten gases tóxicos a la atmósfera. Pero tienen influencias negativas en el medio ambiente: