Llegó a ser héroe legendario, por su esfuerzo en la lucha en todas las campañas de Chile y Perú. Conocido históricamente como el general Aldao (por su rango militar) o padre Aldao (popularmente llamado "el fraile" por sus enemigos).
San Martín lo designó capellán del Ejército de los Andes, no retornando nunca a sus deberes sacerdotales.
Defendió a la provincia de Mendoza de las fuerzas invasoras y fomentó el asentamiento de campesinos inmigrantes chilenos en el sur de la misma. Causante de la devoción de sus soldados y de toda la gente humilde a la que él alimentó y protegió, a la vez que cultivó odios, entre ellos el de Sarmiento.
Hasta su muerte en 1845, mantuvo el completo control de la provincia y sus alrededores.
Junto con sus hermanos Francisco y José dominaron el área cuyana durante las décadas de 1820 al 40 y actuaron en las guerras civiles.
Fueron aliados San Martín y verdaderos protagonistas en los acontecimientos de la época. |