Los cánidos aparecieron primero en el Eoceno medio-superior (Duchesneano) de Norteamérica. Su subsecuente evolución incluyó tres principales radiaciones adaptativas sucesivas y en parte solapadas, y este patrón se refleja en la subdivisión tripartita de los cánidos en tres subfamilias: Hesperocyoninae, Caninae y Borophaginae.
Los cánidos no se extendieron al Viejo Mundo hasta el Mioceno superior o el Plioceno inferior, y fueron tan exitosos en Norteamérica que aparentemente bloquearon durante buena parte del Terciario toda invasión significativa de miembros de otras familias de carnívoros similarmente adaptados. Su evolución fue favorecida por la extensión de sabanas y más tarde por ambientes de pradera, como resultado de un deterioro del clima mundial de las condiciones más tropicales propias del Terciario inferior.
Para las especies actuales, los estudios genéticos coinciden en determinar dos tribus: Vulpini y Canini, pero no coinciden en incluir en ellos determinadas especies o géneros. Primero se distinguió entre cuatro grupos filogenéticos principales (Ostrander, 2008): el grupo que incluye al zorro común (géneros Vulpes, Alopex, Nyctereutes y Otocyon), el que incluye al lobo gris (Canis, Cuon y Lycaon), el de las especies sudamericanas (Atelocynus, Cerdocyon, Dusicyon, Lycalopex, Chrysocyon y Speothos) y, por último, el género Urocyon, que integra el clado más diferenciado. Los estudios más reciente incluyen el clado de todos los géneros específicamente sudamericanos, junto con el clado de los lobos dentro de la tribu Canini y, por otra parte, dentro de la tribu Vulpini, tanto el clado del género Vulpex (incluidos en el Alopex y Fennecus), como también el género Urocyon, pero dejando al género Nyctereutes por fuera de las dos tribus.3 Otros estudios indican sin embargo que Vulpes y Nyctereutes tienen una estrecha relación filogenética y forman un grupo hermano.
Los cánidos se dividen en tres subfamilias, de las que solo una, la de los caninos (Caninae), tiene especies vivientes
Las características más distintivas de la familia de los cánidos:
En los años setenta del siglo XX, el lobo rojo (Canis rufus) se extinguió en estado silvestre como especie pura por dos motivos:
Posteriormente, esta especie se reintrodujo en el norte de Carolina (EE.UU.) y en la actualidad la población es de más de 50 individuos
LOBO IBÉRICO (Canis lupus signatus)Familia: CanidaeOrden: CarnívoraEstado: En peligro. Apéndice IIDescripción: La morfología del lobo indica su capacidad depredadora: sus fuertes mandíbulas con 42 piezas, su amplia caja torácica y sus voluminosos músculos maseteros.Un lobo adulto puede tener una longitud entre 100 y 120 cm, y una alzada a la cruz entre 60 y 70 cm. Puede pesar entre 30 y 50 kg. Las hembras son más pequeñas que los machos.Hábitat: Suele ocupar una amplia variedad de hábitats. Es una especie muy adaptable a cualquier medio, su presencia está condicionada a la disponibilidad de alimento.Costumbres: Vive en manadas y tiene una sociedad con doble jerarquía: la pareja reproductora del grupo es la dominante, es decir, el macho alfa y la hembra alfa.Conservación: El lobo ibérico se encuentra en peligro de extinción en la mitad sur de la península Ibérica. Es una especie conflictiva, perseguida y cazada ilegalmente por muchos ganaderos porque se alimenta del ganado doméstico. Otros problemas que presenta la conservación del lobo son la deforestación de su hábitat, los incendios forestales y el uso incontrolado de plaguicidas.
PERRO SALVAJE AFRICANO (Lycaon pictus)Familia: CanidaeOrden: CarnívoraEstado: En peligroDescripción: Altura en la cruz de 75 cm. Pesa entre 20 y 30 kg. Es de cabeza maciza, como la hiena, y de cuerpo esbelto. Tiene manchas negras, amarillentas y blancas irregularmente repartidas por todo el cuerpo.Hábitat: Sabanas abiertas con vegetación arbolada o en la montaña.Costumbres: Forma jaurías de 5 a 20 individuos. Caza de modo organizado y devora a sus presas, gacelas e impalas, rápidamente. Los machos activos son los encargados de abastecer de comida a las hembras y a las crías.Conservación: Es un carnívoro altamente amenazado de extinción. Vive en pequeñas poblaciones dispersas, por lo que una buena medida sería facilitar la conexión entre estos grupos para tratar de prevenir su desaparición.