Su personaje de sanatero, que supo interpretar tanto en la radio como en la televisión, donde intervino en el programa Operación Ja-Já en sus dos sketches principales: «La peluquería de don Mateo» y «Polémica en el bar» junto a Javier Portales, Vicente La Russa, Mario Sánchez, Adolfo García Grau y Juan Carlos Altavista (éste interpretando a Minguito Tinguitella), fue uno de los más recordados.
La sanata de Pintos, según los diccionarios de lunfardo (el argot de Buenos Aires) es una «manera de hablar confusa, incomprensible, en la que se expone un argumento sin sentido ni ideas claras».
En 1950 en Radio Callao, daba vida a sus personajes Churrinche y Mesié Canesú.
A través de la comedia picaresca, fue uno de los pioneros donde supo demostrar su gran talento humorístico tanto en el cine como en el teatro de revistas, donde compartió cartel con las vedettes del momento, como Susana Giménez, Moria Casán, Ethel Rojo, Nélida Lobato, Nélida Roca, Zulma Faiad e Isabel Sarli; y con otros grandes del género como Alberto Olmedo, Jorge Porcel, Pepe Arias, Alfredo Barbieri, Don Pelele, José Marrone, Dringue Farías y Adolfo Stray.