Nació en el seno de una tradicional, aunque humilde familia de la provincia de Catamarca el 22 de abril de 1816.
Uno de los argentinos más destacados y con mayor participación en la vida financiera del país. Fue uno de aquellos jóvenes de la generación de Mayo que, como Echeverría, Varela, Gutiérrez y otros, vieron interrumpidos
sus estudios y su formación por el vendaval provocado por el gobierno de Juan Manuel de Rosas. Las luchas civiles lo obligaron a emigrar y radicarse en Chile. Después de Caseros regresó a su patria.
En 1863, fue elegido diputado por Catamarca, cargo que desempeñó luego en otras oportunidades. Actuó en la Convención Reformadora de la Constitución de 1866. Fue Ministro de Hacienda del gobernador de Buenos Aires don Emilio Castro, oportunidad en la que desarrolló una amplia labor relacionada también con las finanzas nacionales, por intermedio del Banco de la Provincia de Buenos Aires.
Como hombre de empresa se relacionó con las primeras explotaciones vitivinícolas en el Río Negro, vaticinando la riqueza de esa región.
Falleció el 2 de agosto de 1909. Pocos meses antes de morir, aunque muy enfermo, conservaba una lucidez intelectual sorprendente, a tal punto que su familia le ofreció una recepción en su residencia de Punta Chica, San Isidro, provincia de Buenos Aires, donde vivía, para celebrar el 93º aniversario de su nacimiento.